viernes, 14 de agosto de 2009

El termómetro de la autoestima



«—¡Pero no hay a quién juzgar! —exclamó el principito.


—Te juzgarás a ti mismo —le respondió el Rey—. Es lo más difícil. Es mucho más difícil juzgarse a sí mismo que a los demás. Si logras juzgarte bien a ti mismo eres un verdadero sabio.»

Antoine de Saint-Exupéry,
El principito, 1943

No hay comentarios:

Publicar un comentario